San José de Ocoa. – El agricultor José Ignacio Maceo Gerónimo falleció ayer martes tras recibir un disparo en medio de una protesta encabezada por productores agrícolas del municipio Rancho Arriba, quienes se oponen al desalojo de cultivos ubicados dentro del Parque Nacional Montaña La Humeadora, declarado área protegida.
El hecho ocurrió durante un operativo de desalojo ejecutado por una fuerza combinada del Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA), la Dirección General de Migración (DGM) y agentes antimotines de la Policía Nacional. La acción generó enfrentamientos con los comunitarios, que bloquearon el Cruce de Juan Luis incendiando neumáticos y denunciando la destrucción de sus plantaciones y viviendas.
En medio de la tensión, Maceo Gerónimo fue impactado por una bala en la cabeza y trasladado de urgencia al Hospital Guarionex Alcántara, donde posteriormente falleció. Las autoridades informaron que investigan las circunstancias del disparo y buscan establecer responsabilidades.
Indignación y tensión en la comunidad
La muerte del agricultor ha desatado indignación en Rancho Arriba, donde líderes comunitarios y familiares exigen justicia y denuncian el uso excesivo de la fuerza en operativos ambientales. “Queremos proteger el medio ambiente, pero no destruyendo familias ni aplicando la ley con violencia”, expresó un dirigente comunitario.
La protesta fue protagonizada por decenas de productores de orégano, quienes aseguran que han sido despojados de terrenos donde cultivan desde hace años. Sin embargo, las autoridades ambientales sostienen que se trata de invasiones ilegales a zonas protegidas del Parque Nacional, donde se ha detectado la tala indiscriminada de árboles, construcción de casuchas y siembra de cultivos en áreas de alta fragilidad ecológica.
El operativo se realizó en la zona conocida como La Cuesta de La Vaca y en las microcuencas del río La Guama, todas dentro de los límites del parque.
Valor ambiental del Parque La Humeadora
El Parque Nacional Montaña La Humeadora abarca 290 kilómetros cuadrados y se extiende por territorios de San Cristóbal, Monseñor Nouel y San José de Ocoa. Es vital por su biodiversidad y porque abastece de agua a las cuencas de los ríos Haina, Nizao, Yuna y Nigua.
Según el Instituto Dominicano de Desarrollo Integral (IDDI), el parque juega un papel esencial en la seguridad hídrica nacional y alberga ecosistemas de alto valor ambiental.
Aunque en 2014 se aprobó un plan de manejo para su conservación, el mismo expiró en 2019, dejando un vacío en la regulación del uso sostenible de sus recursos.