Más de 500 internos lograron escapar de una prisión en Mirebalais, una ciudad ubicada en el centro de Haití, luego de un ataque armado perpetrado por miembros de la coalición Vivre Ensemble (Vivir Juntos) este lunes, según la Red Nacional de Defensa de Derechos Humanos (Rnddh).
De los 532 detenidos que escaparon, aproximadamente 460 estaban a la espera de juicio. La coalición armada irrumpió en la ciudad, invadió la estación de policía, incendió un número no precisado de casas y atacó la cárcel, logrando tomar el control de la zona, tras enfrentarse con civiles y policías que intentaron oponerse al ataque.
Estrategia de las Bandas Armadas
Este tipo de asalto a prisiones forma parte de la estrategia de las bandas armadas para aumentar su número de efectivos, reclutando a aquellos detenidos que logran escapar. Según los informes preliminares de medios locales, varios miembros de las bandas armadas fueron abatidos por la Policía Nacional, que ha recibido refuerzos, incluidos vehículos blindados, para hacer frente a la situación.
Las bandas responsables del ataque provienen de las zonas de Canaan y Croix-des-Bouquets, ubicadas al norte de la capital haitiana, Puerto Príncipe.
Pánico y Desplazamiento Masivo
Durante todo el día, la ciudad vivió en un ambiente de pánico. Además de los ataques a las fuerzas del orden, el Hospital Universitario de Mirebalais (HUM) fue uno de los objetivos de los pandilleros. Como resultado, miles de residentes fueron forzados a abandonar sus hogares y buscar refugio en áreas cercanas.
Crímenes en Haití y el Impacto de las Armas Ilegales
El contexto de violencia en Haití sigue siendo alarmante. Según datos proporcionados por el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, entre julio y febrero pasados se registraron 4,239 asesinatos y 1,356 heridos como consecuencia de crímenes perpetrados con armas de fuego ilegales. Estas armas, que se encuentran en circulación a pesar del embargo de armamento impuesto por la ONU, son cada vez más sofisticadas, con estimaciones que sugieren que hay entre 270,000 y 500,000 armas circulando en el país. El 92% de las víctimas fueron alcanzadas por estas armas, aumentando la preocupación por la creciente inseguridad en Haití.
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