Un 68% de la población dominicana presenta un índice de masa corporal (IMC) elevado, y de este porcentaje, un 32% padece de obesidad, cifras que han ido en aumento desde 2010, de acuerdo con el World Obesity Atlas 2025, publicado este lunes por la Federación Mundial de Obesidad. El estudio, basado en datos de organismos internacionales como el Instituto de Métricas de Salud y la Organización Mundial de la Salud (OMS), proyecta que para 2030, 5,78 millones de dominicanos tendrán un IMC alto (igual o superior a 25 kg/m²), lo que traerá consigo problemas de salud y muertes prematuras asociadas a este factor.
El sobrepeso y la obesidad han aumentado de manera significativa tanto en hombres como en mujeres en la República Dominicana. En 2010, 1,42 millones de hombres tenían un IMC elevado, cifra que subió a 1,69 millones en 2015, y se espera que llegue a 2,56 millones para 2030. En el caso de las mujeres, el aumento es aún más alarmante: en 2010 había 1,76 millones de mujeres con IMC elevado, cifra que subió a 2,11 millones en 2015 y se proyecta que alcance los 3,21 millones en 2030.
Estas cifras reflejan un aumento en todos los niveles de IMC elevado: desde el sobrepeso (25-29,9 kg/m²) hasta la obesidad moderada/severa (más de 35 kg/m²). La obesidad severa es especialmente preocupante, ya que en 2010 había 120,000 hombres con un IMC mayor a 35, cifra que se disparará a 310,000 para 2030. En el caso de las mujeres, se espera que el número de personas con obesidad severa pase de 270,000 en 2010 a 800,000 en 2030.
Estos altos niveles de IMC están estrechamente relacionados con problemas de salud. En 2021, se registraron 3,516 muertes prematuras vinculadas al sobrepeso y la obesidad, y 82,068 personas padecían enfermedades asociadas, como diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, enfermedades isquémicas del corazón y cáncer, entre otras enfermedades no transmisibles.
Los factores de riesgo principales son la insuficiente actividad física, que afecta entre el 30% y 40% de los adultos, y el consumo excesivo de bebidas azucaradas, con un promedio de 1,000 a 2,500 mililitros consumidos por persona cada semana.
Este panorama resalta la urgencia de tomar medidas preventivas y promover hábitos de vida más saludables para frenar el avance de esta epidemia de obesidad y sobrepeso en la población dominicana.