Oficial de la Fuerza Aérea acaba con la vida de dos personas a balazos

Con el corazón destrozado y entre lágrimas, la madre del raso Jeremy Calzado Elías, de 22 años, no logra asimilar la tragedia que ha marcado para siempre a su familia. Durante el velorio, lo describió como un joven ejemplar, lleno de sueños y profundamente querido por todos.

“Mis hijos están destrozados, yo también estoy destrozada… su papá y toda la familia”, expresó, visiblemente conmocionada. Contó que tuvo un mal presentimiento ese día y le pidió a Jeremy que no saliera de casa, pero, lamentablemente, la tragedia fue inevitable.

El caso que rodea su muerte aún no está claro, y la incertidumbre ha aumentado la angustia de sus seres queridos. Familiares y allegados aseguran haber recibido diferentes versiones sobre lo ocurrido. “Primero dijeron que fue por un problema con otro muchacho, luego que se enfrentó al que le quitó la vida… hay muchas versiones y no sabemos en cuál creer”, expresó un doliente.

Jeremy era reconocido por su disciplina y pasión por el béisbol. Antes de unirse a las filas militares, soñaba con convertirse en pelotero profesional. “Él estaba jugando pelota, pero dijo: si no va a ser pelotero, vámonos para la guardia”, relató un vecino.

En el momento de su muerte, Calzado Elías se encontraba fuera de servicio y debía reintegrarse a sus labores oficiales este miércoles, según informó su madre. Era el cuarto de seis hermanos y vivía junto a su familia en el sector El Mamón, del municipio de Guerra.

El cuerpo permanece en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) para los procedimientos legales correspondientes. Tanto la familia como la comunidad exigen una investigación exhaustiva que aclare las circunstancias en las que perdió la vida este joven militar.